Si nos seguís en nuestras redes sociales (Facebook, Twitter, Google Plus, Instagram, como recuerdo, por si acaso), hace poco pudísteis ver que hicimos la maleta, nos subimos al avión y tuvimos la gran suerte de visitar Edimburgo, una preciosa ciudad escocesa medieval, con una gran tradición y gusto por la cultura, en particular por el teatro y en la que nos sentimos como en casa. Esta antigua ciudad fortificada, además de un castillo majestuoso, calles con unas cuestas interminables y unos bares con una maravillosa cerveza artesanal, esconde, además de su antigua versión subterránea, una incipiente tendencia hamburguesera que nada tiene que envidiar a lo que tenemos por estos lares.
Como no os queremos provocar una sobredosis carnívora, hemos realizado una importante criba para reducir los lugares más destacados a tres. Por supuesto, hay mucho más y la lista podría llegar a ser infinita, pero bueno,e stos son los que más nos gustaros y así os los hacemos llegar.
OINK
Posiblemente la gran sorpresa de nuestro paso por Edimburgo. Habíamos oido hablar de él y no hicimos mucho caso, pero nada más pasar por su puerta, mejor dicho, por su "escaparate", nos vimos atraídos a entrar, como si un rayo tractor nos hubiese atrapado.
Sí, como lo veis, los dueños de este restaurante sacan un cerdo de sus granjas, lo asan y lo disponen en cada uno de los locales que tienen diseminados por la ciudad. Los empleados se encargan de deshilacharlo y sevirlo en unos panecillos que podremos elegir y de regarlos con unas salsas deliciosas. También le meten un acompañamiento para que todo tenga más sabor. Cómo no, nosotros no nos pudimos decidir por otra cosa que por el archi famoso haggis.
Aquí no hay mucho misterio, la burger nos la dan envuelta en papel de plata y así todo es más fácil de limpiar. Aquí se busca rapidez, sin descuidar la calidad. Sin duda una de las hamburguesas más contundentes, a la par que sencillas, que pudimos degustar en nuestra visita. Eso sí, nada de patats fritas ni nada que se le parezca, una pena, pero bueno...
Y todo en un local más bien pequeñito, pero acogedor, donde todo está dispuesto para entrar, comer y salir en tiempo récord y en el que se vive un auténtico culto por el cerdo y sus carnes.
Web | http://www.oinkhogroast.co.uk/
WANNABURGER
Y si hablamos de comida rápida, nada como Wannaburger. Aunque no es un fast food al uso, al entrar al local sentimos un poco de tensión al pensar que en cualquier momento nos iba a asaltar el payaso maligno y nos iba a pedir explicaciones. Pero no, al leer las opciones a elegir nos dimos cuenta de nos encontramos ante un lugar que no puede faltar en nuestra guía de la ciudad.
Pero lo mejor es cuando nos vibra nuestro avisador y regemos el pedido, viendo que lo que se plasma en las letras es una realidad muy jugosa. Pan bien tostado, queso bien fundid y un bacon que ya le gustaría a muchos tener. Toda una delicia al mejor nivel gourmet que no sale nada cara, tanto en versión single, como en forma de menú
Además, el siempre eterno haggis tampoco pudo faltar en una de nuestras elecciones. Y es que estos edimburgueses le ponen esta suerte de morcilla a todo lo que se precie y hemos de decir que en una burger está más que de muerte.
Pero hay algo mejor, mucho mejor. Hemos sugerido la opción de menú, la cual fue por la que nos decantamos, pero es que aquí, como si de un local de lo más profundo de los USA se precie, en vez de refresco, podemos tirarnos a por BATIDOS. Sí, como lo leéis, un buen batido fue lo que nos pedimos para "tragar" nuestras burgers, en concreto un Black & White (no preguntéis). Y lo mejor de todo es que estaba espectacular.
Efectivamente, eso son patatas fritas, aquí sí que nos las ponen y están bastante ricas y nada grasientas. Aquí todo nos viene en vaso, menos la burger y hay que decir que, además de curiosa, la ración es más que justa. Otro sitio donde degustar una hamburguesa de calidad a precios tirando a bajos.
Web | http://www.wannaburger.com/
TAILEND
Aunque este restaurante no es un sitio de burgers como tal, más bien es uno de los mejores sitios de la ciudad donde comer un fish & chips ESPECTACULAR, no pudimos evitar lanzarnos a por una hamburguesa cuando la vimos en la carta. Gracias a la recomendación de nuestro amado Lolo, de Yelp Madrid, llegamos a esta suerte de freiduría, buscando un filete empanado delicioso y unas patatas fritas a la altura. Y eso fue lo que encontramos.
Con su poquito de limón, su puré de guisantes y su salsa tártara, este plato, aparte de ser un imprescindible en una visita a cualquiera de las islas británicas, estaba realmente espectacular. Un buen pescado, un rebozado con un sabor a mantequilla exquisito y unas patatas fritas de ésas que no se encuentran en ningún sitio. Vamos, que ya por este fish & chips ya merece la pena el paseo para descubrirlo.
Y si además le sumamos que tienen dos hamburguesas, una de carne y otra de pescado, la cosa ya se pone interesante. Nosotros nos tiramos a por la segunda, ya que queríamos ir de originales. La "carne" esta vez era de algo parecido al bacalao, rebozada y súper cujiente, con lechuga, tomate y cebolla roja, os decimos de verdad que, a pesar de ser una burger que normalmente no pedimos, nos dejó realmente sorprendidos.
Además, el pan viene tostado, fresco y esponjoso, vamos, que no se puede pedir más. Una burger perfecta para completar este trío hamburguesero ganador. Todo enmarcado en un local más bien pequeño, pero bien decorado y con un servicio la mar de simpático. La verdad es que Tailend, además de ser la gran sorpresa, nos dejó encantados y con ganas de repetir, aunque nuestros estómagos estuviésen ávidos de sitios nuevos y el tiempo no nos lo permitiera.
Web | http://www.tailendedinburgh.co.uk
Y hasta aquí el repaso de los locales que pudimos ver en esta maravillosa ciudad que es Edimburgo y que pensamos que no os deberíais perder si paseáis por sus calles. ¿Los conocéis? ¿Hay algún sitio que echéis en falta? Estaremos encantados de ecuchar vuestros comentarios y ponerlos en práctica en futuras visitas.
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