
Las hamburguesas en sí tienen buen sabor y la carne no parece de un sitio barato, luego tendremos todo tipo de opciones para añadirle, previo pago, por supuesto; nosotros nos quedamos con los pepinillos, el extra de queso y la cebolla crujiente (mmmmm). Las patatas se sirven aparte y hay gran variedad de estilos adecuados para cada uno.
No hablamos de los camareros, porque no los hay. El contacto humano entre el cliente y el local se basa en el cajero que tomará nota de tu pedido y te cobrará y el mismo cocinero que te entregará tu pedido directamente desde la propia cocina.
En definitiva, una opción más que saludable si estáis por el barrio y os apetece un buen trozo de carne con pan y no disponéis de mucho efectivo en ese momento.
Y tú, ¿eres de los que prefieres un sitio más reposado para tus hamburguesas o estás dispuesto a probar una forma nueva y diferente de comer una hamburguesa de calidad? Esperamos, como siempre, vuestros comentarios.
Comentarios
Obviamente, mejor que un burger king! Comida rápid...
Obviamente, mejor que un burger king! Comida rápida de calidad y diferente. Es como entrar en un local de NY! Calidad y buen precio. Imprescindible!
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