Nuestra búsqueda de hamburguesas con las que flipar en el sur de Madrid no siempre ha sido ideal, pero alguna sorpresa nos hemos llevado, aunque también nos hemos llevado grandes decepciones. Pero, a pesar de todo esto, nuestra búsqueda sigue adelante, descubriendo, probando y escuchando las recomendaciones que vosotros, hamburgueseros de pro, nos mandáis. Así llegamos a Twister Rock & Food, en Leganés, situado en una zona de bares que pudo tener mejores días, pero que merece, por sí solo, esta incursión. Nada más entrar, descubrimos un local pequeño, un antiguo pub irlandés reconvertido en un sitio donde disfrutar de buena música, probar cervezas dispares, copas con destilados de calidad y comer, por supuesto.
Y claro, a eso vamos nosotros, a comer. Para eso, nos encontramos con una carta bastante completa, ni muy larga ni muy corta y con un denominador común: las hamburguesas, que podemos customizar a nuestro antojo, empezando por el pan, siguiendo por la carne y acabando por el tipo de receta o combinaciones que queremos degustar. También podemos elegir el peso de la carne, siendo los 160 gramos el mínimo y pudiendo llegar a los 480. Todo con precios adecuados, aunque ojo, que se nos puede ir la mano y lo acabaremos pagando en exceso.
Para empezar, como no podía ser menos, nos animamos con unos nachos Tex-Mex que nos dejaron un poco fríos. A pesar de su cantidad, de sobra para dos personas, el plato acaba siendo un puñado generoso de totopos redondos, una especie de salsa rosa, pimientos picados y salsa agria, con unas rajas de jalapeños encurtidos completando. Como decimos, más allá de la ración, poco podemos añadir que nos gustase.
Mucho ojo, porque, a partir de aquí, vais a sentir la irrefrenable necesidad de conocer el Twister. Empezamos con una hamburguesa Queen con salmón, queso italiano ahumado y salteado de boletus, muy bien abrazado por un pan de cerveza con semillas de amapola sin tostar pero fresco, que aguantó en todo momento. Los ingredientes casaron a la perfección desde el primer bocado y aunque, esta vez, sustituimos el vacuno por pescado, la disfrutamos de principio a fin, con buena textura y un sabor únicos.
Pero si esto ya os ha llamado la atención, la Red Hot, con doble carne de ternera, aros de cebolla crujientes, queso Cheddar, bacon y salsa barbacoa ligeramente picante os hará llorar de la emoción como hicimos nosotros. La carnaza tiene un sabor profundo, que se complementa a la perfección con el resto de ingredientes para hacernos llegar a un éxtasis total.
Por si fuera poco, la protagonista, la carne, se deja disfrutar el doble, no sólo por la cantidad solicitada, sino por el picado casi perfecto y el punto de cocción clavado. No os engañamos que, si no es por detalles como la falta de tueste del pan, estas hamburguesas estarían muy alto en lo que a preferencias se refiere.
Como guarnición, en todas las elecciones, tenemos patatas fritas, cortadas en gajos y sazonadas con pimentón. No acabamos de distinguir si, por la textura, son caseras o no, ya que estaban algo pasadas de cocinado. Detalles que no nos impidieron disfrutarlas, sobre todo por las maravillas a las que acompañan.
Y es esto, cuestión de detalles, lo que hace que Twister Rock & Food no se alce a lo más alto absoluto de nuestro ranking, pero lo que sí que tenemos claro es que es un descubrimiento, un tesoro, que se esconde bien y que no sólo merece la pena descubrir y revisitar, sino que ya soñamos con volver a darle un bocado a estas creaciones de autor tan bien conseguidas. Todo con unos precios en la media y más que justificados ante la calidad que encontramos.
PRECIO DESGLOSADO DE LA VISITA
1 AGUA: 1.95 €
1 REFRESCO: 2.45 €
1 NACHOS TEX-MEX: 7.9 €
1 HAMBURGUESA QUEEN DE SALMÓN: 11.3 €
1 HAMBURGUESA RED HOT DOBLE: 11.5 €
TOTAL: 35.1 €
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