Mucho ha cambiado el panorama hamburguesero en Madrid desde que visitamos, por primera vez, Juancho's, un puesto de mercado en el que se hacían dos hamburguesas hasta que se acabasen las existencias. Tras esto, ganadores del primer concurso nacional de burgers, fama a tope y una expansión loquísima, que culminó con un food truck en el que probaron a hacer smash burgers; una experiencia que les fue tan bien, que se han animado a hacer este concepto permanente, recuperando el concepto de puestecillo, en el Mercado de San Antón, donde ofrecen, apenas, media docena de opciones, con unos cuantos acompañamientos y un postre. Todo es muy sencillo, recuperando la idea de lo callejero, que le va perfecto a esta variedad de burgers.
Así que allí nos presentamos y tras revisar el menú, comprobamos que todas las creaciones son muy diferentes entre sí, yendo desde lo simple hasta la culminación de la moda de la salsa Lotus. Todo con unos precios adecuados, aunquehaya que reoger las bebidas en otro punto, donde te clavan 3.5 € por un refresco.
Empezamos hincándole el diente a la Bacon Esmás Burger (11.5 €), con dos discos de carne aplastados, pero sin llegar a ser smash de verdad. Aunque no importa, porque encontramos mucha jugosidad y sabor en una carne, la de Juancho's, que se ha hecho muy famosa. Buena textura y equilibrio, donde destaca, en lo negativo, un bacon muy poco cocinado, que no correoso. Nos recuerda a esa primera vez en el local de esta marca. Mismo sabor y mismas sensaciones, cosa muy difícil de mantener hoy en día.
Nos llama la atención el pan, que no resulta simétrico con respecto al resto de ingredientes, además de no presentarse tostado, aunque es fresco y tierno. Acompaña, sin grandes alardes, en una combinación donde la carnaza es la protagonista.
Pero la gran sorpresa llegó con la Champions Esmás Burger (12.9 €), con sendos patties, queso y champiñones como base de locura. Y es que, normalmente, recelamos de las hamburguesas con hongos, ya que se suelen comer el sabor del conjunto, dejándolo bien soso. Pero aquí fue todo lo contrario y el primer bocado nos dejó totalmente alucinados. La sabrosura es la característica general aquí, además de una cremosidad inusitada, que hicieron que devorásemos a la pequeña sin, apenas, darnos cuenta.
Gran parte de la culpa de ese punch la tiene la salsa trufada, que no empalaga y potencia todos nuestros sentidos, haciendo que deseemos que esta burger no se acabe nunca.
Como acompañamiento, ya que las hamburguesas se sirven sin nada, nos decidimos por unas bacon cheese cheddar fries (5.9 €), con mucho queso y unos bacon chips súper sabrosos. Las patatas, por supuesto, son caseras, cortadas en bastones y deliciosas, que se funden con la mezcla, dando como resultado algo que roza el pecado.
Y de postre, una porción de una tarta de queso (5.9 €) súper cremosa que, si bien no aporta un sabor de gritar de placer, cumple y se deja devorar tras una experiencia adecuada.
En definitiva, este nuevo concepto de Juancho's llega aprovechando una moda que pone a las smash burgers por encima de sus homónimas clásicas. Aunque es una técnica sencilla, hay que dominarla bien, cosa que aquí no se consigue, aunque el resultado final es más que decente. Carne jugosa y sabrosa, pan demasiado grande y como conclusión, irregularidades que hacen que, aunque disfrutamos con esta visita, le pidamos mucho más a una marca que, sin duda, lo sabe hacer.
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