Ya ha pasado mucho tiempo desde que conocimos en persona a Juan Pozuelo y caímos rendidos ante su dominio de los fogones y de las hamburguesas en particular. Siempre que hablábamos con él, aprendíamos un montón de cosas nuevas sobre carnaza emparedada, aunque hacía ya un tiempo que le perdimos la pista, debido, en parte, a sus nuevos proyectos (que pintan muuy bien). A pesar de ello, nuestro querido chef no puede dejar de lado su pasión hamburguesera y se ha decidido a abrir un pequeño espacio, enmarcado dentro de la nueva propuesta foodie del Mercado de Barceló, el Food Market Barceló. Aquí, rodeado de opciones gastronómicas muy variadas, a cada cual más interesante, se ubica la nueva opción carnívora de Juan L'OB, con tres burgers, otros tantos perritos calientes y carnes al corte.
Como decimos muchas veces, en la sencillez radica el secreto del éxito y aunque no tenemos una carta muy extensa, sí que nos ofrecen las opciones suficientes para disfrutar. Todas las hamburguesas cuestan 9.75€ y vienen acompañadas de patatas fritas y aunque os pueda parecer un precio algo elevado, la calidad de la materia prima ya lo justifica.
Pero entrando en materia y después de haber pedido un par de vermús para acompañar a nuestras queridas burgers, empezamos con la degustación de la hamburguesa ibérica o lo que es lo mismo, carne Simmental, queso manchego, panceta ibérica, tomate asado, mahonesa de pimentón, lechuga y ketchup de elaboración propia. Vamos, una locura de sabores, sobre todo de la carne, tremendamente blanda y jugosa, con un picado exquisito, cercana a un steak tartare, con la que no nos cabe la menor duda, se puede comer sola, sin más.
Además, el queso, a pesar de no aportar todo el sabor qu ele pediríamos, está muy bien fundido y no adquiere ningún protagonismo sobre la carne, al igual que pasa con la mahonesa de pimentón, la cual aporta un acento de sabor, pero sin llamar la atención. Y por si fuera poco, el punto de cocinado es clavado, consiguiendo que nos olvidemos que estamos en un mercado, donde, a veces, este tipo de detalles nos e cuida tanto como debería.
La Hamburgurgo también pasó por nuestras fauces, haciendo un claro homenaje al punto donde empezó todo. Con la misma carnaza, acompañada de bacon, choucrout, chutney de pepinillos, mostaza, ketchup y lechuga. Aquí los sabores ácidos y amargos, además del ahumado, juegan de la misma forma, aportando cierta presencia, pero sin quitar un ápice de gusto a la carne, lo que hace que nos enamoremos más de ella.
El panecillo elegido para todas las combinaciones es original y se diferencia del típico americano, resultando un curioso cruce con uno de chapata, pero conservando las semillas y la esponjosidad del primero. Echamos de menos un poquito más de tostado en su interior, pero no es algo muy reseñable.
Como os hemos adelantado al principio, todas las hamburguesas vienen acompañadas de patatas fritas en aceite de oliva y aunque esperábamos que fuesen cogeladas, la sorpresa fue mayúscula cuando encontramos en ellas un gusto casero que las hace ideales. Y eso que se nos ofrecen las salsas que hicieron famoso al maestro Pozuelo en su anterior andadura hamburguesera, lo cual hace imposible evitar la tentación de remojarlas en ellas.
En definitiva y como dice la canción, Juan Pozuelo ha llegado silenciosamente, des-pa-ci-to para volver a conquistarnos con su buen hacer hamburguesero y con una carne que es oro puro. L'OR, a pesar de ser un espacio pequeñito, se deja disfrutar, de momento, sin grandes agobios, ya que el espacio gastronómico del mercado todavía no se ha puesto de moda, por lo que todos los carnívoros podemos disfrutarlo como se merece, con el añadido, además, de la gente que nos atiende, grandes conocedores del producto que venden y la mar de simpáticos. Gran descubrimiento, que supera las expectativas.
PRECIO DESGLOSADO DE LA VISITA
2 VERMÚS ZARRO: 5 €
2 HAMBURGUESAS: 19.5 €
TOTAL: 24.5 €
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VAYA
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